Presentación

¿Cómo nos vemos?                                             

El Instituto de la Paz Juan F. Pepén desde el año 2005, promueve una investigación y acción a favor de la paz, a partir de los contenidos de la Carta de la Paz, dirigida a la ONU. Nuestro deseo es contribuir a unas relaciones más cordiales y armónicas con nosotros mismos, los demás y con la naturaleza; también entre grupos y países. Como Institutos de la Paz ubicados en algunas ciudades del mundo, somos un colectivo en red coordinado por la Univesitas Albertiana.

En septiembre del 2007, el Instituto de la Paz de Santo Domingo (República Dominicana), adoptó el nombre de Juan F. Pepén (1920-2007) como homenaje póstumo a este gran dominicano: íntegro, ejemplar, solidario y muy religioso.  Durante toda su vida de entrega sacerdotal defendió la dignidad del ser humano, trabajó por el desarrollo de las personas y el bien común; como obispo supo ser valiente y un hombre constructor de paz en nuestro país.

Con la familia de Juan F. Pepén, 2008

 ¿Quienes somos?

Los integrantes del Instituto de la Paz Juan F. Pepén somos  un grupo de personas inquietas por el ser humano, su dignidad y promoción que trabajamos en diversas áreas y disciplinas en la República Dominicana. Desde el año 2005 estamos promoviendo una investigación multidisciplinaria y   una labor de sensibilización sobre la paz, a partir de los contenidos de la Carta de la Paz, dirigida a la ONU, con el deseo de contribuir a lograr una mayor armonía y paz en nuestro país y en el mundo.                                                                                                                   

Panel en Casa cuesta, Noviembre del 2009

La Carta de la Paz, dirigida a la ONU es un documento escrito por un colectivo humano con gran sensibilidad por la paz. Se dirige a todos aquellos que tengan deseos de trabajar en la construcción de la misma. Consta de una introducción, diez puntos, una conclusión y una posdata; en ella se señalan unos principios sobre los cuales se puede fundamentar una paz sólida y duradera.

Estamos convencidos que para lograr la paz, las personas, los distintos grupos sociales y las instituciones, debemos ocuparnos de ello y colaborar; pues nadie puede quedar excluido de tan importante labor. La paz la entendemos como un conjunto de valores que conforman nuestras vidas desde la libertad y la amistad a partir de la justicia, el respeto, la solidaridad, los derechos y deberes humanos, entre otros. 

En septiembre del 2007, el Instituto de la Paz de República Dominicana adoptó el nombre de Juan F. Pepén (1920-2007) como homenaje póstumo a un gran dominicano, cristiano y ciudadano íntegro. Durante toda su vida defendió la dignidad del ser humano, trabajó por el desarrollo y el bien común, y supo ser un constructor de paz con su testimonio y sus palabras.

Los objetivos del Instituto de la Paz Juan F. Pepén son

Promover la Paz en todas sus dimensiones humanas. Sensibilizar a las personas de la importancia de construir la paz con esfuerzo y dedicación. Difundir y promover en la República Dominicana, la Carta de la Paz, dirigida a la ONU.  Impartir cursos y seminarios de formación sobre cultura de paz y la necesidad de paz a partir de los fundamentos señalados por el texto de la Carta de la Paz.  Investigar y reflexionar cómo construir una cultura de paz.  Profundizar de manera interdisciplinaria cada uno de los puntos del documento Carta de la Paz, en especial el punto 5, sobre la hermandad por el hecho de existir y la solidaridad.  Convocar profesores y expertos de distintas disciplinas para elaborar pensamiento sobre la paz. Publicar materiales y textos en torno a las reflexión y aportes en el tema de la paz, especialmente, desde el tema de la solidaridad y la hermandad en la existencia (punto 5 de la Carta de la Paz).  Promover actividades a favor de la Cultura de la paz (rutas de paz, charlas, tertulias, talleres y festivales, entre otras).

Preparando una actividad del Instituto, 2010

Antecedentes históricos del Instituto de la Paz 

La Carta de la Paz, dirigida a la ONU fue presentada públicamente y por primera vez en Barcelona (España) en el año 1993; desde entonces se ha difundido en ciudades de más de 80 países de los cinco continentes. En Santo Domingo, la Carta de la Paz dirigida a la ONU, se presentó por primera vez y de manera solemne en Casa Bastidas, el 5 de diciembre de 1993. Posteriormente en otras ciudades del país.

Hasta el momento, se han realizado cuatro entregas de la Carta de la Paz, dirigida a la ONU al Secretario General de las Naciones Unidas, presentando todo el material recopilado alrededor de la misma en los diferentes países del mundo (firmas y adhesiones, memorias de cursos, seminarios, conferencias, artículos de opinión publicados en prensa y revistas especializadas, etc.).

Paralelamente a la promoción y difusión de este documento, ha ido surgiendo un trabajo reflexivo y de investigación sobre la paz, con el deseo de contribuir a lograrla a nivel personal, grupal y, entre pueblos y naciones. En República Dominicana, también se ha ido realizando esta labor en torno al deseo de construir paz desde los lineamientos que propone la Carta de la Paz, dirigida a la ONU.

La Universitas Albertiana  creó los Institutos de la Paz en distintos lugares del mundo, con el objetivo de aglutinar y desarrollar estas investigaciones interdisciplinarias y profundas, entorno a la cultura de la paz a partir de los contenidos de este documento. 

Hasta el momento existen Institutos de la Paz en Santo Domingo (República Dominicana); en México, DF y Hermosillo (México); en Santiago (Chile). También en Asía Oriental, así como en Roma (Italia);  y en Salamanca, Santa Coloma de Gramanet, Badalona  y  Barcelona (España).

El Instituto de la Paz Juan F. Pepen de la Universitas Albertiana, desde su creación en el año 2005 está promovido y respaldado legalmente por el Ambito María Corral de Santo Domingo, institución que trabaja en República Dominicana desde 1988 y que fue reconocida por el Estado Dominicano en 1991 a través de la Ley 520 sobre asociaciones. La misión del Ámbito Maria Corral como asociación cultural es reflexionar y profundizar temas de actualidad desde unos valores universales que favorezcan una convivencia humana más solidaria y, a la vez, desea ofrecer criterios de referencia para la sociedad.